La
cabeza del hombre que amó da vueltas en el interior de la lavadora; enhorna su
torso, y añade salvia y limón; con las extremidades aún no sabe qué hará. Pensaban
que era un poco idiota pero, a decir verdad, a Barbie no la engañarían dos
veces.
Inspirado en "Centrifugado" de Patricia Esteban Erlés
Se quedó mirándolo, absorta, casi
adolescente; restaban demasiadas cosas por aclarar entre ambos. Respuestas contra
un sinfín de noches en vela y excusas a medio cocer. Se quedó mirándolo, como
si todavía estuviera allí, y nada hubiese pasado.