Ventana al mundo

Ventana al mundo

lunes, 10 de septiembre de 2012

Aquella noche de noviembre

A las afueras de Tokio, un hombre percibe a través de su whisky cómo algunos tipos le observan. Es imposible que todavía sepan nada de su deserción en la China Roja. Pese a ello, apura su copa y sale del local. Un frío punzante invita a no pararse esta madrugada.

Al mismo tiempo, en Italia, a última hora de la tarde, un ejército de obispos liquida las reformas con las que esperan dar impulso a sus dogmas. Parecen felices después de días de tensión.

Mientras se abrazan, Lee Harvey Oswald prepara su arma. En apenas treinta minutos el presidente Kennedy estará a su alcance.

Pero de todo esto te enterarás mucho después. Un niño está de camino y tú, nervioso, sólo separas la mano de tu mujer para limpiarte el sudor y echar para atrás la melena.
 

8 comentarios:

  1. Tantas cosas pueden pasar en un mismo momento... será verdad eso del hilo rojo, tan fino, que nos une a los otros??? Al menos, alguna de ellas puede ser buena no?
    Me encanta "el efecto mariposa" de tu texto, sin ser eso en efecto...
    Saludos desde el Inframundo.

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  2. A mí, como a Credendo, esta pieza me llevó al efecto mariposa, Miguel Ángel y sabiendo que no es eso, tampoco sé por qué.

    Es la condensación temporal y ese hilar de destinos lo que dota de potencia a este micro que -no tengo dudas- te deja masticando sobre el porqué de las cosas.

    Un abrazo,

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  3. Qué bueno, Miguel, esos senderos paralelos con un denominador común: el inicio y el fin de la vida. Sabes que los obispos son mi pasión (nunca mejor dicho). Ese paso al segunda que nos hace participes, en este caso de lo que de verdad nos importa.

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  4. Lo más importante es ese niño, lo demás en este caso son casualidades que ocurren mientras llega al mundo. Me gustó.

    Besitos

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  5. Brillante el micro. Estaba pensando en la teoría de los seis grados, que bien merece un micro dos o tres, pero el final es incluso más digno que la mencionada.

    Enhorabuena.

    Una perta.

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  6. que bien se te da esto, piri mio.

    solo digo que de publicar este, juntos con todos los demas que se que publicaras, estará en mi biblioteca personal

    nos vemos

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  7. Hola Miguel Angel, este micro tiene impregnado la trascendencia del tiempo, del minuto del segundo ...en el que ocurren mil historias diferentes : uno nace y otro muere, un ciclo inagotable del que a veces no entendemos.

    Me encanta cómo lo cuentas. :)

    Un abrazo desde mis palabras, agradecidas por tu visita de ayer y un propósito de enmienda ...¡nunca olvidaré que Page he de asociarlo con una "realidad ilusoria"!.

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  8. Bonitos relatos....mis felicitaciones. Saludos.

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